Mes 12



En su primer añito, los niños están para comérselos. Son una monada y a los padres nos deleitan con sus primeras carantoñas, que se basan en tirar besitos con las manos. En cuanto a la sociabilidad del bebé, se percibe un aumento. El niño ya no quiere estar solo bajo ningún concepto, necesita verse rodeado de gente. Y si lo está, romperá a llorar.
Pero no sólo necesita compañía afectiva, sino también para el ocio. Él no quiere estar ni jugar solo. Aún depende mucho de sus papás para sentirse seguro, y lo seguirá haciendo también aunque sea mayor. Asimismo, cada día comprende mejor lo que le dicen, aunque su capacidad de hablar sea limitada y balbuceé palabras ininteligibles para los padres. No obstante, se nota una evolución y ya puede perfectamente decir su edad enseñando el uno con el dedo indicador.
Ahora el pequeño comienza también a mostrar su carácter. No sabe hablar bien, pero sí sabe reaccionar cuando no quiere algo o sencillamente le molesta. Alguna que otra rabieta puede surgir en esa etapa, debido a que el bebé probará algo de independencia al transitar de un lado a otro. Eso le dará más confianza y por lo tanto reaccionará con enfado delante de sus propias limitaciones impuestas por sus padres.

No hay comentarios:

Publicar un comentario